Realidad virtual para ganar la lotería
La realidad virtual ha dejado de ser un concepto de ciencia ficción para entrar a forma parte de nuestra vida diaria. Cualquiera con un dispositivo móvil tiene acceso a la realidad aumentada y virtual que definitivamente cambiará el mundo tal y como lo conocemos. Esta tecnología permitirá a los consumidores experimentar una realidad diferente basada en las necesidades y deseos personales. Una realidad personalizada y adaptada a las exigencias particulares de cada individuo, donde el nivel de satisfacción será el objetivo principal.
Por otra parte, el uso de esta tecnología cambiará la forma en que los usuarios se involucran y expandirá las capacidades de los negocios para interactuar con dichos usuarios. Esta tecnología presenta infinitas posibilidades que, combinadas con apps y teléfonos móviles puede llevar a grandes transformaciones. En este sentido, el mundo de la lotería y juegos de azar no podía quedarse atrás. Por este motivo y para mejorar la experiencia de los usuarios, comienzan a incluir a la realidad virtual. En este sentido, los desarrolladores prefieren la realidad aumentada y la realidad virtual para crear nuevas apps de loterías y atraer a más usuarios.
Nueva York como pionera de estos avances de Realidad Virtual
La Lotería de Nueva York ha sido la pionera en incorporar a sus juegos de loterías el uso de la realidad virtual con un nuevo juego de rasca y gana de realidad aumentada en 3-D. Su nombre: Champions of Cash (Campeones del dinero en efectivo), y su formato, una presentación en forma de juegos de baloncesto, baseball y fútbol. Una novedad que funcionó desde abril hasta junio del 2017, y ofrecía premios de hasta 25.000 dólares. La respuesta del público fue muy positiva para ser la primera vez que algo así irrumpía en el mundo de las loterías.
El funcionamiento era bastante sencillo. Tras la compra de sus billetes de lotería, los jugadores tan solo tenían que instalar la aplicación de la Lotería de Nueva York, raspar la parte indicada en el boleto y escanear el código obtenido con sus teléfonos móviles. Si seleccionaban jugar al baloncesto, aparecía una cancha y un jugador al que podían manejar libremente. Por cada canasta acertada, los usuarios obtenían puntos o premios, que luego podrían canjear en los puestos de lotería autorizados. Además, estos puntos eran acumulables en una tabla clasificatoria, en la que competían con otros usuarios por nuevos premios.
Esta forma de jugar a la lotería no sólo es novedosa, sino también divertida y original. Pero, aunque parezca algo muy nuevo, en realidad esta no fue la primera vez que la Lotería de Nueva York ofreció a sus clientes un juego de realidad aumentada. En 2016 también crearon Gold Castle “El castillo de oro”. Con él, los billetes cobraban vida, y el jugador debía buscar sus premios en las diferentes ventanas del castillo. Una mezcla entre videojuego y juego de azar que combina a la perfección diversión y premio de una forma única.
Otras ciudades se suman a la realidad virtual en la lotería
No solo Nueva York ha probado con la realidad virtual en la lotería, en España también se han dado pasos adelante en este sentido. La administración de lotería Turó de la Peira colaboró en 2012 con la empresa Wion para dar vida a Loti, una particular mascota de la suerte, con vistas a un famoso sorteo anual. Por otra parte, la Lotería de Canadá fue un paso más allá ofreciendo a sus clientes ganadores una simulación de realidad virtual en la que se recrean diversos escenarios. El objetivo de esta experiencia era mostrarles qué tipo de situaciones tendrían que afrontar al ganar un premio considerable, y poder así orientarles en sus decisiones.
En este caso, la aplicación se desarrolló con la colaboración de la fundación Jasmin Roy, un grupo que también lucha contra el bullying y cuyo objetivo era “sensibilizar a los ganadores de lotería y darles las herramientas necesarias para afrontar las situaciones que les puedan surgir en su nueva vida”. Esta iniciativa forma parte de un programa de apoyo a los ganadores de lotería que incluye llamadas o reuniones periódicas, con el fin de proporcionarles toda la información necesaria para utilizar su dinero de forma responsable. En este caso, una forma muy enriquecedora y útil de utilizar la tecnología para ayudar a las personas.
Durante la inmersión en la experiencia de realidad virtual, los ganadores se enfrentan a diversos escenarios que les preparan para lo que puede venir luego de recibir el dinero del premio. Desde la reunión con la familia para informarles del golpe de suerte a la aparición en medios de comunicación, el software cubre varias opciones. Entre estas opciones se contempla la posibilidad de que aparezcan desconocidos que suplican por obtener algo de dinero, o amigos que se creen con derecho a participar de las ganancias por en nombre de la amistad. Aunque pueda parecer cómico, en realidad está preparando a los afortunados para aprender a manejar mejor estas situaciones llegado el momento.
Esta experiencia creada en septiembre de 2017 por Vincent Quezada para la lotería de Quebec, en Canadá, es bastante probable que se extienda a otros países como Estados Unidos o México, debido a la cada vez mayor importancia de diversos juegos de azar y loterías en estos países. Sea como fuere, la realidad virtual ya es una realidad en nuestra sociedad y cada vez formará parte de más aspectos de la vida diaria, desde tener experiencias de compra más satisfactorias a estudiar o desarrollar una habilidad o asistir a una reunión o consulta médica.
Si a lo ya de por sí emocionante que es participar en juegos de azar o comprar un billete de lotería esperando ser el acertante, le sumamos la experiencia de realidad aumentada, las posibilidades de formar parte de este entretenimiento aumentarán considerablemente. Los dueños de loterías lo saben, por eso no han dudado en invertir en el desarrollo de nuevos juegos y apps con las que conquistar a los usuarios y ofrecerles experiencias más ricas y novedosas. Eso sí, no hay que olvidar que para cualquier tipo de juego de azar, siempre hay que jugar de manera responsable.